top of page

Cracovia - Varsovia en 5 días

Día 1: Vuelo Barcelona - Cracovia (26.12.17)

Jarmark-Bożonarodzeniowy-Krakow.-620x330
Galería de fotos de Cracovia con enlaces y explicación

Madrugamos mucho para poder llegar a coger el vuelo temprano y aprovechar las pocas horas de luz que quedaban para pasear por Cracovia (al ser Diciembre para las 15:30-16:00 ya era de noche) y situarnos un poco. Para ir del aeropuerto a la estación de tren principal nos decidimos por coger transporte público (BUS 208 - 4zl el normal y 5zl con transbordo) De la estación de tren al apartamento cogimos un taxi (22 zl) con ayuda de un chico que estaba por allí y era de los pocos que hablaban inglés, aunque podríamos haber ido andando. Pero en ese momento no sabíamos que estábamos tan cerca de casa. Tuvimos problemas a la hora de coger la llave del apartamento porque en Polonia era día festivo y el lugar donde la teníamos que recoger estaba cerrado. Al final conseguí contactar con el dueño y se nos paso un poco el enfado al ver lo chulo que estaba decorado y lo poco que teníamos que andar para poder disfrutar de todo el barrio judío.

 

Cuando por fin nos asentamos en la que iba a ser nuestra casita los próximos 2 días, decidimos salir a descubrir la ciudad. Tras 10 min andando nos encontramos con un free tour del barrio judío en castellano que acababa de empezar (15:00h), así que nos unimos a ellos para aprovechar la tarde mejor. La chica lo explicó todo fenomenal y dándonos bastantes consejos para cenar platos típicos polacos, tiendas de recuerdos... Hacia la mitad del tour llegamos a una plaza "Plac NOVY" en la que había un quiosco donde vendían Zapiekanki, una especie de panini enorme.

El tour terminaba en la plaza de la selección y de allí nos fuimos a cenar al restaurante PLAC NOWY 1, al lado de una de las sinagogas. Nos habían recomendado el bar ALCHEMIA, cerca del anterior, pero para cuando fuimos ya no había sitio. Este último es el típico bar judío muy oscuro y con velas para iluminar. De ahí a descansar para coger el día siguiente con fuerza. Al ser los días tan cortos hay que aprovechar para madrugar y poder visitar todo antes de las 15:00h.

Día 2: Visitando Cracovia (27.12.17)

Lo primero que hacemos siempre que visitamos una ciudad en un buen free tour en castellano (cuando voy sola no me importa hacerlo en inglés). En este caso cogimos el del casco histórico de Cracovia ya que normalmente están destinados para una toma de contacto con la ciudad y conocer algo de historia casi siempre interesante. Lo reservamos también con la misma empresa anterior. Después del tour visitamos las cosas que nos habían enseñado mientras paseábamos. Se puede entrar a la Catedral del Castillo de Wawel y a la Basílica por la parte del rezo y la entrada es gratuita. La zona de la plaza "Rynek Główny" con la decoración navideña es una maravilla y además se puede ver al trompetista tocar en la torre de la basílica anunciando cada hora del día. Visitamos también el reloj de la universidad "Collegium Maius" en el que salen unas figuritas bailando a las 9:00, 11:00, 13:00, 15:00 y 17:00.

Como no teníamos mucho tiempo para ver la ciudad y además nos estaba encantando, comimos en el mencadillo navideño de la plaza; una sopa "Barszcz Czerwony" típica de aquí por 12zl y unos "Pierogi" por 8zl, también un plato típico que consta de pasta rellena parecido a los ravioli. 

Tras comer rápidamente en una de las mesas alargadas grupales, nos fuimos a la "Sinagoga de Remuh" que es la única que actualmente se utiliza para el rezo. Tuvimos mala suerte porque estaba cerrada desde las 16:00h. No nos importó tanto cuando vimos que justo al lado había un bar típico de judíos llamado "Dawno temu na kazimierzu". Muy recomendable porque tenía la esencia de antaño; oscuridad, velas en vez de lámparas, mesas de madera, baño decorado, etc. La cerveza y una botella de sidra nos costó 21zl. 

Volvimos a subir al centro de la ciudad para ver la plaza del mercado de noche, nos sorprendió que todavía es más bonita que de día. Había mucho ambiente y se podían contemplar los puestos y de paso picar algo de comer. Como todavía teníamos hambre y queríamos también refugiarnos un poquito del frío (no hacía un frío polar pero tampoco se estaba del todo a gusto paseando tanto después de todo el día trotando), nos fuimos a cenar. Cenamos en el restaurante "kuchnia u babci maliny" por recomendación del guía; era importante porque hubo una pelea allí por parte de altos cargos de los nazis. Está situado enfrente del Teatro Juliusz SlowackiLa verdad que cumplió nuestros objetivo de probar comida polaca pero no nos gustó mucho como nos lo sirvieron y habiendo probado otras cosas sabíamos que la comida típica nos gustaba. El precio fue de 84 zl para un entrante, un plato principal y un postre. Pagamos con 100zl y no nos devolvían el dinero porque pensaban que lo dejábamos para propina. Solo lo recomendamos para ver la decoración. 

Después a casa, duchita relajante y a dormir para coger el siguiente día con mucha fuerza.

Día 3: Auschwitz + Minas de Sal (28.12.17)

Nos despertamos super pronto porque teníamos que estar a las 6:15 en el autobús con destino a Auschwitz y las Minas de Sal. El tour duraba 6h y 30min y te enseñan tanto Auschwitz I como Auschwitz II-Birkenau. El itinerario está explicado en este enlace. El tour no es todo seguido; tienes un tiempo al medio día para comer donde tú quieras, aunque la misma organización del tour te da unos tíckets de comida para ir al "BEER HOUSE hostel" y comer de forma gratuita a excepción de la bebida. Nos gustó la idea de comida gratuita y allí que fuimos. Cual fue el problema, que casi todo el mundo del tour estaba esperando y por poco no llegamos luego para coger el autobús que nos llevaría a las Minas de Sal. Llegábamos a las 13:00h a Cracovia y a las 14:00 estábamos saliendo para ver las minas de sal. Hay que decir que la comida estaba muy rica y te ponían aperitivo para pasar mejor la espera.

Otra vez de vuelta al autobús pusimos rumbo a las minas de sal. Nos impresionaron bastante porque no creíamos que fuese aquello tan inmenso. Puedes encontrar hasta una capilla de sal en esas minas. tuve mucha suerte porque me eligieron de entre el grupo en el que íbamos para  darle vueltas a un molinillo y ver como hacían para subir o bajar los bloques de sal. Me pasé las 4h y media que duraba la visita pasando el dedo por las paredes y relamiendo la sal como una niña pequeña.

Había sido un día duro de viaje y de frío, así que fuimos por el centro de la ciudad (Calle Florianska y plaza) para comprar mi  imán rutinario de cada viaje y algún que otro souvenir.

Al ser la última cena en Cracovia no queríamos irnos sin visitar y probar la cocina del restaurante "Pod Wawelwm" tan famoso en esta ciudad. Por fin probamos el "Golonka" y otra vez "pieroguis". La experiencia fue magnífica, y aunque al principio pensamos que el golonca era demasiado grande, no solo nos lo terminamos sino que untamos el plato como si no hubiera un mañana disfrutando de la música en directo que ofrecen.

Como aun teníamos un paseito hasta el apartamento, fuimos caminando y bajando la comida antes de meternos de nuevo en el sobre tras un día bastante intenso. 

Día 4: Tren Cracovia - Varsovia (29.12.17)

Galería de fotos de Varsovia con enlaces y explicación

Este día despertamos con una capa blanca cubriendo las aceras y copos de nieve cayendo del cielo. No podía imaginar mejor despertar para despedirnos de una ciudad llena de encanto navideño. Teníamos las maletas preparadas y listas para no perder tiempo a la hora de ir a coger el tren. Aun nevando, fuimos a la "Sinagoga de Remuh" y al cementerio judío al que habíamos ido anteriormente y estaba cerrado. En esta ocasión pudimos entrar sin problema aunque tuvimos que pagar una pequeña cantidad de dinero por entrar a las instalaciones. Yo no quería irme sin visitar una sinagoga en Polonia. El cementerio nos sorprendió porque había piedras en vez de flores encima de los tejados de las tumbas; esto se debe a que el pensamiento de los judíos es que las flores se marchitan con el tiempo y en cambio las piedras siempre perduran.

Sacamos dinero en un banco con un cambio altísimo al lado del apartamento porque nos urgía para el billete, cogimos las maletas y nos fuimos a la estación de tren de Cracovia (andando porque estaba cerca de nuestro apartamento). Tuvimos muy mala suerte porque al no tener prisa por irnos, no miramos el horario de los trenes; estabamos alli a las 12:00h y hasta las 15:30h no salía el siguiente tren económico hasta Varsovia. Pensamos rápido y en el momento y decidimos ir a comer al restaurante del tour "BEER HOUSE hostel" porque teníamos otro ticket y para no perder tiempo después comiendo en  Varsovia.

Al final no nos salió tan mal el cambio de planes porque conseguimos coger hora para subir a la torre de la basílica a las 13:45h y ver al trompetista tocando en ese momento. La visita dura 30min entre subir, disfrutar de las vistas y bajar un porrón de escaleras. Como a las 14:00h justo estábamos en lo alto de la torre pudimos echarnos fotos con el trompetista y escuchar desde arriba como sonaba su trompeta. Fue toda una experiencia para Michel ya que el es "trompetista txaranguero".  

Como la estación estaba cerca nos dio tiempo de todo y tener tiempo para buscar nuestro tren y tener que esperar un rato en la vía.

Llegamos a la estación de Varsovia y fuimos andando hasta el hotel. Dejamos las cosas sin organizar nada de nada y andamos durante 30min para llegar al centro de la ciudad donde se encuentra, entre otros atractivos, "El Castillo Real/The Royal Castle" con su mercado navideño que todavía funcionaba.Para la hora que fuimos nosotros ya estaba cerrado, y es que como he comentado antes, estas ciudades tienen diferente horario que en nuestro país en cuanto a restaurantes y comenrcios debido a las pocas horas de luz.

 Anduvimos por el centro disfrutando de la iluminación de esta ciudad; había un rincón marcado a mano derecha del castillo por el que seguías un camino de luces y te encontrabas con un montón de figuras recubiertas de luces de colores. ¡ESPECTACULAR! Aguantamos hasta las 23:00 aunque ya había muy poca gente por la calle; como nos estaba gustando tanto decidimos estar un poquito más porque no íbamos a quedarnos muchos días en Varsovia y no sabíamos si el tiempo nos acompañaría el resto de las noches. Tras otro paseo de vuelta hacia el hotel, pudimos disfrutar también de la zona más moderna de la ciudad; llena de tiendas y grandes almacenes. Nos dábamos por satisfechos y nos fuimos a dormir.

Día 5: Varsovia (30.12.17)

Nuestra estancia en Varsovia fue express. El único día entero que teníamos para visitar la ciudad era este, pero tampoco nos queríamos agoviar y no disfrutar de nada. Decidimos ir a nuestro ritmo y a lo que nos apeteciera en cada momento. No madrugamos mucho porque el free tour por la capital de Polonia era a las 10:30, aunque habíamos quedado en la plaza del castillo y teníamos un ratito andando. Aún nos dio tiempo de ver algunas de las iluminaciones que habíamos visto la noche anterior, pero esta vez de día (tren, regalos...). El free tour fue por  el Centro histórico de Varsovia, en este caso lo cogimos con "Free walking tours" y duro 2h; el guía era muy majo pero no se le entendía mucho porque no era español. A ver, para ser la segunda o tercera lengua que hablaba el tío era un crack. El tiempo no nos acompañó mucho y lo estábamos pasando un poco mal aun yendo abrigados. Después de las explicaciones, el guía nos dió recomendaciones de restaurantes típicos de allí para tomarnos una sopita caliente y recuperarnos del frío. Antes de ir al restaurante decidimos dar una pequeña vuelta por las callejuelas de Varsovia y aprovechar el poco tiempo que teníamos. Queríamos ir al free tour del barrio judío pero hacia tanto frío que decidimos quedarnos un poco más  en el restaurante donde comimos la típica sopa de remolacha (Barszcz), codillo (Golonka) muy rico para los dos y unas torras de manzana (racuchy) también típicas de allí. No me acuerdo del nombre del restaurante, solo recuerdo que tenía un gallo en la puerta y tenía una bonita decoración polaca; Todo nos costó unos 80zl. 

 

El barrio judio lo visitamos por nuestra cuenta después de comer; tuvimos que andar mucho y el edificio de la calle Prozna estaba realmente en mal estado. Se supone que es uno de los edificios que todavía quedan intactos desde el movimiento nazi; no se si tuvimos mala suerte pero estaba con telas que lo tapaban y no se podía apreciar apenas nada. Aun así lo rodeamos y tocamos porque no deja de ser algo histórico. Justo en frente había una iglesia con una pequeña plaza en la que se veía una decoración navideña espectacular; todo de bolas de luces de diferentes tamaños y colores. No quisimos ver más ya que nos desilusiono bastante el barrio en sí. Puede que fuese porque veníamos de Cracovia y lo que ves allí te toca un poquito más el corazón. Volvimos al centro que ya estaba iluminado y nos encontramos con grupos de villancicos y como no, mucha muchísima iluminación. Paseamos por las calles y visitamos las iglesias que estaban repletas de belenes. En la iglesia de la calle "15 Świętojańska" que va de la plaza del mercado a la principal, se exponen belenes muy curiosos hechos de pasta, piñas y demás alimentos. Compramos recuerdos y bebimos chocolate caliente de los puestos navideños. Estuvimos toda la noche paseando y contemplando las luces. Después nos fuimos a cenar a nuestro apartamento, duchita caliente y preparación de maletas para irnos al día siguiente.

Aunque no visitamos las cosas más turísticas de Varsovia (solo con el free tour) nos fuimos encantados de esa ciudad. Creemos que fue un acierto poder disfrutar de ella en Navidad porque la decoración era espectacular. Sin lugar a duda, para nosotros Varsovia es una de nuestras ciudades Europeas favoritas para pasar la navidad. En un pequeño espacio puedes encontrarte trenes de luces, calles enteras brillando y bolas gigantes con las que salen unas fotos de postal fantásticas; muchísima decoración por todos los rincones. Nos fuimos enamorados de la magia que desprendía.

  • White Facebook Icon
Join my mailing list

© 2023 by Going Places. Proudly created with Wix.com

bottom of page